Si su derecho a la ciudadanía proviene de una línea materna anterior a 1948, el consulado es una vía cerrada. Nuestro servicio de juicio por inconstitucionalidad es la única solución legal. Llevamos su caso a los tribunales de Italia y obtenemos su ciudadanía por sentencia judicial.
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Si su línea de descendencia italiana incluye a una mujer que tuvo a su hijo/a antes del 1 de enero de 1948, el consulado rechazará su solicitud. Esto se debe a una antigua ley (Ley 555/1912) que impedía a las mujeres transmitir la ciudadanía.
Sin embargo, la Constitución Italiana de 1948 consagró el principio de igualdad. Basándonos en esto, la justicia italiana ha determinado en miles de fallos que esa antigua ley es inconstitucional y discriminatoria.
Nuestro servicio de “Juicio por Vía Materna” es la única solución legal para obtener su ciudadanía en estos casos. En lugar de ser rechazado por el consulado, presentamos una demanda judicial directamente en los tribunales de Italia para que un juez reconozca su derecho por sentencia.
Es simple: revise su línea de descendencia directa. Si encuentra a la primera mujer en esa línea y ella tuvo a su hijo/a (el siguiente en su línea) antes del 01/01/1948, usted debe ir por vía judicial. Si lo tuvo después de esa fecha, puede ir por vía administrativa (consulado).
Aunque en derecho nunca existe una garantía del 100%, la jurisprudencia para los casos de vía materna es consolidada y abrumadoramente favorable. Los tribunales italianos han reconocido este derecho de forma sistemática durante años, sentando un precedente muy sólido.
No, en absoluto. Todo el proceso se realiza a través de un poder especial (una procura) que usted firma en su país. Nuestros abogados en Italia lo representan en todas las instancias.
Si bien los tiempos judiciales varían, un juicio por vía materna actualmente tiene una duración promedio de 1.5 a 3 años, desde que se presenta la demanda hasta que se obtiene la sentencia final. Es significativamente más rápido que esperar un turno consular que puede demorar una década.
Sí. Todos los descendientes del mismo antepasado italiano que estén en esta situación pueden (y deben) sumarse a la misma demanda. Esto optimiza el proceso y reduce significativamente los costos por persona, ya que se presenta una sola carpeta y un solo juicio para todo el grupo familiar.